Strong enough
Soy una cometa en el medio de un huracán. Me aferro con mis palabras mágicas al suelo que apenas piso. Invoco con mis piedras al poder supremo. Explota el aire en mis pulmones como bocanadas de un dragón agonizante. Me hubiera bastado una pequeña chispa para creer en las estrellas. Pero la ausencia de un pequeño gesto por su parte hace que deje de esperar nada de nadie.
Canta Damien Rice ("Stones taught me to fly. Love, it taught me to lie. Life taught me to die, so it's not hard to fall when you float like a cannonball") y yo he encontrado entre un montón de papeles el teléfono de My sweet shabashini. Le gustaba que le llamase así aunque no sabía lo que significaba, simplemente porque decía que le gustaba cómo sonaba. Lo saqué de un poema de Tagore, que narraba la historia de dos hermanas, una de ellas se llamaba Shabashini, que significa "la que tiene dulce voz". Ella no cantaba pero había tocado la batería en un grupo con amigos del instituto. Ella pintaba. Le gustaban los impresionistas. Y yo le prometía puestas de Sol bajo los pinos en un acantilado frente al Mediterráneo. Era difícil no hacerlo fácil. Me hacía sentir adulta y fuerte y sacaba mi lado más tierno. Le gustaba Ani Difranco y Led Zeppelin y montar en moto. Soñaba con cruzarse Europa en moto. Yo me cansé en seguida de sus pataletas infantiles. No quería ser su madre. Una vez salía de casa y al cruzar un paso de cebra, un conductor borracho empotró su moto contra un árbol. Sólo tenía diecinueve años. En vez de sentarse en una Harley desde París a Roma, tuvo que contentarse con montar en una silla de ruedas desde su cuarto al salón. No era permanente, pero tardó casi tres años en poder volver a sentir las piernas. Su hermana pequeña le pegaba. Su madre nunca estaba en casa, su padre nunca lo estuvo. Me llamaba para que yo le prometiera que todo iba a salir bien. Y yo le mentía...
Pero a mi nadie me miente, todos se empeñan en golpearme con la más pesimista de las verdades. Me miento yo, casi todos los días, porque así me siento menos inútil. Trato de verlo todo de tal modo que mis piedras sean mi muralla y no mi ancla.